Redacción Colombiabus – William Marroquín
ENTREVISTA A DANIEL RODRÍGUEZ, CONSULTOR DE LA MARCA
Scania ha estado en Colombia desde hace más de 25 años, pero desde 2010 opera con representación directa, recibiendo soporte tanto de Brasil, como de casa matriz en Suecia. Esa apuesta los llevó a convertirse en líderes en Colombia en el segmento de grandes buses de carretera, fuertes en sistemas masivos y progresando rápidamente en vehículos de carga.
En Scania entienden muy bien la realidad de los transportadores, y por eso han desarrollado un esquema de soporte integral para atender sus necesidades: tecnología, red de servicio, posventa en las instalaciones del cliente, financiación directa, ingenieros de preventas, logística y administración de ventas, contratos de mantenimiento, servicios conectados y gestión de flotas, amplia disponibilidad de repuestos y mucho más.

Una estructura de soporte robusta que ahora desplegarán en ciudades intermedias, a donde apuntan con sus soluciones de movilidad sustentable y manteniendo el respaldo a los transportadores de carretera. Daniel Rodríguez, Asesor Comercial de Buses y Camiones de Scania Colombia, conoce el sentir de quienes movilizan pasajeros y con él conversamos para saber hacia dónde se mueve la operación.
COLOMBIABUS: Varias ciudades intermedias quieren incorporar soluciones de transporte sustentable. ¿Cuáles son los puntos de dolor de los transportadores en esas regiones y cómo están para asimilar los cambios tecnológicos?
DANIEL RODRÍGUEZ: Se les ha dificultado entender las razones del costo inicial de adquisición de los vehículos. Para ellos es muy complicado pasar de las busetas y busetones que estaban acostumbrados con normas de emisiones anteriores, a adquirir unidades significativamente más costosas.
En pandemia se han visto muy afectados por la menor ocupación y la reducción en la demanda de pasajeros, enfrentándose a problemas de caja. Ahí entran en escena las empresas de transporte que deben mejorar sus estructuras, impulsando la renovación de las flotas y embarcándose en las nuevas tecnologías.
En varias ciudades los transportadores desean seguir incorporando vehículos con las tecnologías existentes, pero los municipios han adoptado planes de desarrollo orientados a movilidad sustentable. Deben organizarse y acoger las nuevas soluciones, o quedarán por fuera del negocio.

CB: Un tema es la reorganización de las empresas operadoras y otro es el respaldo de los municipios ¿Cómo pueden las administraciones de las ciudades impulsar la modernización del transporte siendo económicamente viable?
DR: Se ve difícil que las alcaldías en ciudades intermedias apliquen el mismo modelo de Bogotá, una posibilidad sería organizar corredores especiales, con horarios y rutas que permitan lograr una buena ocupación de los vehículos, ayudando a la viabilidad económica. La financiación también es clave, pues la banca local no los considera sujetos de crédito, se está buscando apalancar la consecución de los recursos para adquirir los buses, como se logró en Bogotá para la renovación de la flota de Transmilenio.
CB: Otro actor importante es el proveedor del energético, en Bogotá y Cartagena han consolidado alianzas con Vanti o Gases del Caribe, ¿Qué piensan los proveedores en las ciudades intermedias para garantizar el adecuado suministro del combustible?
DR: Cada ciudad y región, tiene su compañía de gas y son fundamentales para estos proyectos sean rentables, por el valor de metro cúbico, pues el costo del combustible impacta fuertemente en la operación y cualquier variación afecta las cuentas de los operadores. Debe definirse muy bien el tema precios, así como una adecuada infraestructura que permita reabastecer rápidamente los vehículos y la calidad del gas.

CB: Para desarrollar el F280, recogieron una gran información de todos los implicados en la operación de transporte masivo ¿Cómo fue el proceso de llevar esa retroalimentación para fabricar el modelo hasta presentarlo a las ciudades?
DR: Eso surgió de la necesidad de las licitaciones de buses zonales en Bogotá, donde se requería bus padrón que cubrimos con el K280CNG y el busetón de 9 metros. De ahí nació el F280 desarrollado para Colombia, pues no se ofrece en otro lugar del mundo, derivado del K280 para cumplir con las exigencias de los pliegos.
El F280 cuenta con el mismo motor del K280, ubicado frontalmente, logramos reducir la distancia entre ejes y marcando diferencias al presentar un bus con 9 metros de largo con gran potencia, transmisión automática más confortable para los conductores y suspensión neumática que también beneficia al pasajero. La caja Allison incluye retardador y sistema ahorrador de combustible.
CB: ¿A los transportadores de las ciudades intermedias, los sistemas de gestión de flota y servicios conectados les intimidan?
DR: Todo lo contrario, cuando les explicamos les gusta mucho, especialmente si tienen una buena cantidad de vehículos para hacer seguimiento a la conducción y al rendimiento. En intermunicipal en principio no le habían dado el valor, en urbano es fundamental por la rotación de conductores y en carga ha sido un gran diferencial, pues lo utilizan bastante.

CB: ¿Se ve viable ampliar la oferta de carrocerías disponibles para el F280?
DR: Siempre hay carroceros interesados en participar, deben tener en cuenta esa curva de aprendizaje que han hecho los otros con el transporte masivo, además es importante garantizar la capacidad para surtir grandes pedidos y el respaldo financiero.
CB: Para 2023, se espera el cambio en las normas de emisiones y adoptando el estándar Euro VI. ¿Consideran que esa tecnología probada en ciudades como el gas natural podrá trasladarse a los buses de carretera nacionales?
DR: En algún momento se deberá llegar y con las tractomulas hemos tenido una experiencia muy buena. Uno de los principales retos en larga distancia, es la autonomía, pues tendrían que alojarse tanques que reducirían la capacidad de las bodegas, además de lastrar el vehículo, eso requiere tiempo y estamos trabajando en ello, también necesitamos entender a los transportadores y saber si lo ven viable desde la óptica de costos de adquisición inicial.
CB: ¿Ya el transportador de carretera sopesa su decisión de compra con base en Costo Total de Propiedad (TCO)?
DR: Eso es algo que todos los días mostramos, que con las soluciones de Scania encuentran economías en combustible y componentes, frente a lo que por muchos años tuvieron, encontrando mayor rentabilidad. Las cuentas rápidas que suelen hacer en ahorros de algunos elementos que tradicionalmente manejan, al final conducen a unos mayores costos y eso se lo tenemos que explicar.

CB: ¿Cómo ha cambiado la forma en que el transportador ve el negocio tras la pandemia?
DR: Siendo uno de los sectores que más afectación ha presentado y viendo la incertidumbre de los usuarios que llevó a una disminución en la movilización de más del 55% en 2020, frente a otras temporadas y unos costos fijos en alza. Los propietarios ven con mucha preocupación la evolución de sus negocios y por ende, los proyectos de compra de nuevas unidades. Aunque su deseo es seguir operando, la preocupación frente al futuro sigue y mientras no se evidencie un panorama de mayor control y un avance significativo en el ritmo de vacunación, será difícil ver una recuperación sólida en el corto y mediano plazo.
CB: La banca tradicional cerró las puertas al transportador de pasajeros ¿Cómo se ha adaptado Scania Finance a esa nueva realidad de los clientes?
DR: Todo lo que logramos entregar durante 2020 fue gracias a Scania Finance. Ellos estructuraron los negocios y demostraron a toda la organización, que la marca en Colombia nació y creció por los transportadores de pasajeros de carretera, no los podíamos dejar solos cuando ellos hace muchos años, pese a algunas dudas, confiaron en nosotros.
Scania Finance replanteó los periodos de gracia, aplicó reestructuraciones y otras mecanismos para que los transportadores puedan realizar abonos. Esta división de Servicios Financieros siempre ha apoyado al transporte intermunicipal, es un gran diferencial frente a la competencia y quienes invierten en la marca, lo notan. No hemos dejado de creer en nuestros clientes, estudiamos nuevas formas de proyectar sus ingresos y el comportamiento futuro de los mismos para hacer viables los negocios.

CB: Adicional a lo hecho por Scania Finance, ¿En qué otros aspectos están apoyando al transportador en su recuperación económica?
DR: Hemos trabajado mucho en la posventa, extender garantías de los vehículos considerando que estuvieron detenidos y eso afecta la vida útil de los mismos. También se han revisado precios de los chasises, no ha sido fácil, pero los transportadores siguen creyendo en Scania y esperamos que a final de año veamos un mayor dinamismo en el segmento de pasajeros.